Vengo de una familia que se fraccionó en el tiempo. Cuatro hermanos, dos niñas y dos varones que crecieron al amparo de una madre tierna y fuerte pero dependiente ( como la mayoría de las mujeres de su tiempo) dependiente de un hombre que veía en el dominio extremo y en la mesa servida, cumplida su función de padre. Todo anduvo bien los primeros años. Puedo asegurar que tuvimos una primera infancia medianamente feliz, hasta que el corazón de mi padre huyó tras otro sueño con nombre de mujer.
No quiero contarles las grietas de la casa, el dolor de mi madre, ni la orfandad que padecimos por un tiempo. Quiero contarles que lo superamos, que luego de muchos atardeceres nublados, mi madre volvió a sonreír y que tantas carencias hicieron de mí y de mis hermanos, personas capaces de enfrentar las adversidades sin dañar a aquellos que nos toca proteger.
Años más tarde formé mi primera familia con la intención de que fuera la única para siempre, pero ese debe ser un pacto de dos y mi ex y yo andábamos senderos diferentes.
Cuando ocurrió el divorcio me prometí a mí mismo que la firma de aquella ruptura nunca incluiría a mis hijas y a pesar de los conflictos inevitables, de la separación, me mantuve siempre cerca y el doble de atento a sus necesidades.
Cuando el amor se asomó de nuevo a mi ventana, llegó con él la preocupación de cómo sería fundar otra familia y sumarla al mí plural (mis hijas y yo) pero el tiempo y el cariño bastaron para alcanzar la armonía.
Después llegaron mis otros hijos ( dos niñas y un varón) que completaron la foto de familia y rellenaron todos los espacios de la felicidad. El amor y las artes han sido nuestro idioma, la presencia de Dios y la tolerancia nos han sostenido hasta hoy.
También yo, como mi padre, he tenido sueños difíciles, pero tras ellos iremos todos, remando juntos, en un mismo bote.
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Todas las fotos utilizadas son de mi propiedad.
ENGLISH VERSION
FAMILYS PICTURE
I come from a family that was fractioned over time. Four brothers, two girls and two boys who grew under a tender and strong but dependent mother (like most women in her time) dependent on a man who saw in the extreme domain and on the table served, fulfilled his function of father. Everything walked the first years.I can assure you that we had a moderately happy early childhood, until my father's heart fled after another dream with a woman's name.
I don't want to tell you the cracks of the house, my mother's pain, or the orphanhood we suffered for a while.I want to tell you that we overcome it, that after many cloudy sunsets, my mother smiled again and that so many shortcomings made me and my brothers, people capable of facing adversities without damaging those who we have to protect .
Years later I formed my first family with the intention of making of it the only one forever, but that should be a pact of two and my ex and I were walking different paths.
When the divorce occurred, I promised myself that the signature of that break would never include my daughters and despite the inevitable conflicts, of the separation, I always kept close and twice as much attentive to their needs.
When love looked again at my window, the concern of what would be to found another family and add it to the plural me (my daughters and me) but time and affection were enough to achieve harmony.
Then my other children (two girls and a boy) arrived, completing the family picture and filling all the spaces of happiness. Love and arts have been our language, the presence of God and tolerance have sustained us until today.
I also, like my father, have had difficult dreams, but in suite of it, we will go paddling together, in the same boat.
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