¿Cómo manejas el estrés laboral? ¿Lo llevas bien, o en algún momento te ha generado algún malestar de salud o problemas dentro de la familia? ¿Prefieres realizar tu trabajo de oficina desde casa?

Hoy es un día perfecto para contestar esta pregunta porque actualmente he tenido que manejar algo de estrés laboral, en este momento mis energías están en el nivel más bajo, a veces creo que soy como una batería de pésima calidad de esas que se descargan con facilidad o simplemente los niños con los que trabajo se conectan a mi fuente de energía chupándose toda mi energía y vitalidad, a pesar de que actualmente realizo media jornada de clases, cada vez siento como si corriera una maratón de 60 kilómetros cada vez que llego del trabajo a casa, mi cansancio se manifiesta sobretodo cuando voy de vuelta a casa, ya después no quiero hacer nada.

En cuanto a mi trabajo diario en el salón de clases, generalmente mi ambiente laboral dentro del aula no es tan agobiante, soy autónoma en mi salón la mayoría de las veces, muy pocas veces me supervisan, a pesar de que tengo esa libertad y tengo autonomía, hago lo que tengo que hacer y soy responsable conmigo misma y con mis estudiantes. Hablando de ellos, Tengo a mi cargo un grupo que a veces están tranquilos y a veces no tanto, sin embargo son niños y es agradable estar con ellos, yo trato de hacer un ambiente laboral encantador tanto para mí como para mis estudiantes, les coloco música, les cuento muchos chistes y ellos se ríen de mis ocurrencias mientras hacen sus actividades, ellos tienen confianza conmigo y conversan sobre su día a día, puedo decir que ellos se sienten cómodos conmigo, claro, no puedo negar que hablan mucho en clases y tengo varios niños traviesos que me sacan canas verdes, así que me toca conversar mucho con ellos a tal punto que debo ser estricta para que cumplan los acuerdos de convivencia, pero a pesar de que son conversadores y a veces me hacen molestar con su comportamiento puedo decir que me siento cómoda con ellos y soy feliz en mi horario de clases.

La cosa cambia fuera del aula de clases, cuando mandan a realizar varias actividades de un día para el otro, donde exigen sin pensar que no podemos hacer tantas cosas al mismo tiempo, sin embargo tengo que llevar el ritmo porque mis compañeras lo hacen y como docentes todos consideran que podemos hacer múltiples tareas, a veces en forma de broma las las docentes decimos que somos: abogados, jueces, primeros auxilios, psicólogos, fotógrafos, revisores, decoradores, mamas, pintores, aseadores y arregladores, enfermeros, constructores, agricultores, vendedores, cocineros, mediadores, policías, diseñadores gráficos, escritores, bailarines, actores, investigadores, informáticos, poetas, presentadores, músicos, animadores, transcriptores, niñeros, técnicos eléctricos y afines, en fin, si eres docente debes ser capaz de hacer cualquier cosa y si no eres capaz de hacer uno de ellos se considera que el docente no tiene vocación o es un mal docente porque no soluciona los problemas.

Todo esto genera una carga mental y cansancio porque no solo tienes que lidiar con los estudiantes, los padres, las revisiones, las metas sino también con los tiempo de ruido, con la alta cantidad de estudiantes que llegan mal preparados y todo esto produce mas sobrecarga mental, lo cual genera un cansancio y eso se ve reflejado en enfermedades, por ello es necesario que los que realizamos esta labor tratemos de relajarnos y no llevarnos el trabajo a casa, de hecho, la mayoría de mis colegas hacen el trabajo administrativo en casa, yo tengo la promesa a mi misma que se trabaja en la oficina y en la casa se descansa sin embargo a veces soy criticada por eso.

Actualmente, estoy en la etapa donde deseo con ansias las vacaciones del fin del año escolar que en mi país es el primero de agosto, las anhelo con todo mi ser porque sé que debo reponer las fuerzas pérdidas para seguir siendo productiva, mi familia por su parte me dice que no haga cosas que no son necesarias solo para que el directivo y las colegas esten felices, que ponga mis limites y asi lo he hecho.

A pesar de que mi empleo me hace enfermar y cansar mentalmente, me gusta mucho mi trabajo porque puedo socializar y enseñar, es algo que disfruto hacer, así que me aliento cada día y prosigo a mi meta: las vacaciones de fin de curso ajajajaj

Bueno amigos así está mi vida laboral en estos momentos, si has leído hasta aquí, te lo agradezco, nos vemos en una próxima oportunidad, hasta entonces.