Serenidad: Un estado mental entre la calma más pura y la confianza más genuina... [Spanish Only]
¿Saben qué es más desafiante para una mente inquieta? Hallar respuestas... Esa acción es, definitivamente, lo opuesto a estar en seriedad y en calma consigo mismo... Una situación, que debo admitir, conozco y mucho. Yo misma fui una mujer totalmente movida por la ansiedad y las emociones negativas en mi juventud. No soy particularmente "vieja', no, pero tampoco soy una niña de 17 años... Esos años se han ido y quedan su poderosos recuerdos; qué sirvieron para formar lo que soy, menta y psicológicamente ahora. Este es un breve relato sobre cómo alcanzar el equilibrio.
Particularmente, no me creo más que nadie. Quizá por ellos dude tanto del coaching y de lo que se supone que pretende en las personas... Lo que sí sé, es que me tomó años de mi vida poder hallar el tiempo adecuado para poder decidir sobre mi rumbo y sobre mis miedos. Fueron demasiado loa años que tuve que transcurrir movida por el temor y la consideración ajena y no de mis propias opiniones... Por tanto, nada de calma y aún menos de autocontrol existía en mí.
Como ya dije, no creo que sea nada especial; la verdad... Dudo, que ninguno de ustedes no haha pasado por una situación similar. Infortunadamente, la vida suele estar más marcada por situaciones difíciles y traumas que de placeres y goces... Es algo triste, pero sí que es un "lado b" que parecemos ignorar deliberadamente... Pero volvamos a mí. Yo no me tomaba en cuenta a mí misma... Es decir, dabia lo que sucedía conmigo y cómo ello me afectaba pero fingía demencia... Cuando se es especialmente adolescente, y luego joven, se desea, se anhela (desesperadamente) encajar.
Da igual la generación de la que procedas, lo que no cambia es ese deseo irrefrenable de querer ser aceptada, querida y cuidada... Son tres "deseos" que mueven absolutamente todo. Por estas razones, yo intentaba guardar mi verdadero yo, mi esencia debajo de "tapete". Sabía que estaba rodeada de gente que no aportaba demasiado en mi vida, al contrario, restaba y en muchos aspectos se aprovechaban de mí pero esa falta de confianza no se inicio con mis ganas de ser querida y amada, sino con la poca independencia y acción con la que crecí desde mi niñez.
Seguramente, ustedes, especialmente las mujeres que lean esto y sean de América Latina, entenderán qué en muchas crianzas, de muchos hogares, es relativamente normal "impartir valores" según el sexo que se posea entre las piernas; una locura total... Si eres hombre, te estimulan la confianza, el ego, la seguridad e independencia; en las chicas es todo lo opuesto. El sentido de sumisión y de aceptación de realidades sociales desfavorables esla norma. Para decirlo más simlme: "¿Tienes un hermano, o tu papá está en casa y mamá no? Debes hacer cena, atenderlos, lavar los platos y sonreír. Porque ese es el deber/misión/lo que se espera de una mujer de bien...". No me extraña que muchas chicas, con ni edad, no deseen tener hijos de ninguna manera...
Aunque, el por qué y sobre todo el cómo aniquilaron mi rebeldía y mi chispa es una historia completamente aparte, no podía no mencionar ese origen, esa génesis. En mi caso, fueron los años de decepción y de lucha ardua, justo después de embarazarme en mis 20's que aprendí aprendí dejar libre a mi verdadero yo. Dejé al inútil con el que estaba (y no, no soy feminazi. Los amo, chicos, en serio. Pero muchos de ustedes, son medio basura) y me enfoqué en tres cosas. Terapia, reconocimiento de mi ser y valentía. Me obsesioné con la idea de ser íntegra y en poder reconocerme siempre, sin importar el contexto. La maternidad me libró de los prejuicios y me exigió mi mejor versión. Desde ese momento aprendí a labrar el camino durísimo que te lleva a la serenidad. A la verdadera y perdurable calma. ¿Soy mejor que antes? Totalmente ¿He dejado de cometer errores? Jamás, lo hago a diario pero sin pretender que no me afectan...