Saludos, amigos de Full Deporte. La historia que les voy a contar es una muestra de la perseverancia y la actitud ganadora que te permiten lograr cualquier objetivo. Es una historia como tantas otras, pero esta la viví de cerca.
Por el año 2010, mi hijo formaba parte de la selección de béisbol pre infantil (12 años) del estado Miranda, junto a otros 20 jóvenes talentos de diferentes ciudades. En este equipo estaba Yilber Díaz, el protagonista de esta historia y quien aparece en la foto de este artículo
"Greetings, friends of Full Deporte. The story I am going to tell you is an example of the perseverance and winning attitude that allow you to achieve any goal. It is a story like many others, but I experienced this one up close.
In 2010, my son was part of the pre-children's baseball team (12 years old) of the state of Miranda, along with 20 other young talents from different cities. On this team was Yilber Díaz, the protagonist of this story and who appears in the photo in this article.
En aquel entonces, la selección de Miranda era una de las favoritas para ganar el campeonato estatal y representar a Venezuela. Todos los estados contaban con equipos muy fuertes, como es habitual en nuestro país, cuna de grandes ligues. Nuestra selección tenía un buen equipo, pero Yilber Díaz no era de los más destacados. Era un chico humilde, delgado, de baja estatura y bastante callado. Lanzaba como pitcher, pero solo cuando el equipo ya iba ganando por muchas carreras, ya que no confiaban mucho en sus habilidades.
At that time, Miranda's team was one of the favorites to win the state championship and represent Venezuela. All the states had very strong teams, as is usual in our country, the birthplace of great leagues. Our team had a good team, but Yilber Díaz was not one of the most outstanding. He was a humble boy, thin, short and quite quiet. He pitched as a pitcher, but only when the team was already winning by many runs, since they did not have much confidence in his abilities.
Ese año, Carabobo se coronó campeón y nosotros quedamos terceros. Los años pasaron y Yilber siguió jugando en las diferentes categorías del béisbol menor, mientras que muchos de sus compañeros de aquel equipo 2010 tomaron otros caminos. Desafortunadamente, mi hijo se lesionó el manguito rotador a pocos meses de firmar como prospecto, y su rehabilitación duró más de un año. Para entonces, ya tenía 16 años, la edad ideal para ser visto por los cazatalentos.
That year, Carabobo was crowned champion and we came third. The years passed and Yilber continued playing in the different categories of minor baseball, while many of his teammates from that 2010 team took other paths. Unfortunately, my son injured his rotator cuff just a few months after signing as a prospect, and his rehab lasted over a year. By then, he was already 16 years old, the ideal age to be seen by talent scouts.
Yilber, con el sueño de firmar un contrato, realizó muchas pruebas en todo el país, pero siempre recibía la misma respuesta negativa. Cansado de las negativas y de la situación en Venezuela, decidió emigrar a Perú en busca de nuevas oportunidades, pero no como pelotero. Allí trabajó vendiendo helados y otros empleos. Sin embargo, los fines de semana jugaba softbol con otros venezolanos que lo motivaron a seguir intentando. Regresó a Venezuela con dos grandes obstáculos: su edad, ya que tenía 20 años, y su velocidad, que no alcanzaba las 90 millas por hora, un requisito mínimo.
A pesar de todo, animado por sus amigos y familia, se dedicó a entrenar día y noche hasta ponerse en forma. Comenzó a enviar videos a todas las academias, pero las respuestas tardaron en llegar y la desmotivación lo invadió. Incluso pensó en regresar a Perú, pero tres días antes de su partida, recibió una llamada de un entrenador que quería verlo. Y así, Yilber Díaz hizo su debut en las Grandes Ligas en julio de 2024, con los Cascabeles de Arizona. Yilber, with the dream of signing a contract, carried out many tests throughout the country, but always received the same negative response. Tired of the denials and the situation in Venezuela, he decided to emigrate to Peru in search of new opportunities, but not as a baseball player. There he worked selling ice cream and other jobs. However, on the weekends he played softball with other Venezuelans who motivated him to keep trying. He returned to Venezuela with two major obstacles: his age, since he was 20 years old, and his speed, which did not reach 90 miles per hour, a minimum requirement. Despite everything, encouraged by his friends and family, he dedicated himself to training day and night until he got in shape. He began to send videos to all the academies, but the responses took a while to arrive and he became demotivated. He even thought about returning to Peru, but three days before his departure, he received a call from a coach who wanted to see him. And so, Yilber Díaz made his Major League debut in July 2024, with the Arizona Rattlesnakes. Imagen Portada y separador: Editada con Canva
Imágenes: Tomadas con mi celular
Traductor: Google
Ortografía y Gramática: Lenguaje Too