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Época
Llego la época que cada año tiene la particularidad y el poder de causar distintos efectos en las personas; sí, una total conmoción y cada persona lo vive de forma diferente. Por ejemplo está el empresario o emprendedor que solo ve la oportunidad de generar más ingresos por venta de adornos relacionados con la Navidad para la decoración, y también el sector de los alimentos, ropa, zapatos y juguetes; sin embargo, hay una alegría contagiosa que nace en el ambiente entre las familias, amigos y demás personas.
El espíritu de la Navidad lo sientes o no, nadie este obligado a nada porque cada quien cree y siente lo que desee; de manera que así vivirá estas celebraciones con sus costumbres y tradiciones. El punto es que se debe sentir para disfrutarlo porque de lo contrario no tendría sentido. Indicarle a las personas que hacer y como; no es el verdadero objetivo de estas festividades que significa tanto para quienes la entienden, porque va desde un tema espiritual de creencias hasta fiestas y gastos.
Así, pues en el seno de cada familia se inculca y desde que eres un niño vas creciendo con esas vivencias, recordando la Navidad de su hogar que en adelante continuara cuando forme su propia familia.
De manera que no es solo un arbolito de Navidad, es llenarte el alma con ese ambiente tan bonito que une a todos; al menos así ha sido siempre en mi familia un compartir y unión genuina de sentarse a la mesa, de abrazos, de música, de regalos y en sí de celebrar juntos. Hay quienes no lo celebran y se respeta, como ya mencione, no es obligado, ni gastar, ni decorar, ni celebrar.
Personalmente, creo que lo celebras si lo sientes, si crees en la Navidad y lo disfrutará de verdad sin compromisos.
Te invito a participar: Concurso. Observa Piensa Escribe.
