Hola a toda esta comunidad 🙋🏻♀️
No estaba segura de publicar, pero quise aceptar la amable invitación de @lilianajimenez para participar en su Iniciativa: ¿Cuál es tu edad subjetiva? ¿De qué edad te sientes?
Antes de compartir mi experiencia, dejen explicar brevemente qué es eso de la edad subjetiva. Se refiere a cómo nos sentimos en relación con nuestra edad; no necesariamente cuántos años hemos cumplido, sino cómo percibimos nuestra vitalidad, juventud o madurez interna. Es un reflejo de cómo nos vemos a nosotros mismos y cómo interactuamos con el mundo que nos rodea, influenciado tanto por nuestro bienestar físico y mental, como por nuestras experiencias y actitudes.
Ahora bien, oficialmente tengo 39 años, pero frecuentemente me dicen que aparento ser más joven. En mi familia, la mayoría parecemos tener menos edad de la que realmente tenemos. Por ejemplo, mi hermana tiene 31 años pero podría pasar fácilmente por una veinteañera. Supongo que podemos agradecer a la genética familiar por parte de madre por esto. Es un tanto cómico cómo nos hemos beneficiado de la juventud prolongada de un lado de la familia, mientras que del otro lado, hemos heredado las canas prematuras 🤦♀️.
Hablando más profundamente sobre la edad subjetiva, siempre he sido una persona que adora la tranquilidad. Desde adolescente, prefería ver una película en casa antes que salir a fiestas ruidosas. Además, tengo un amor especial por las plantas y el tejido a crochet, hobbies que generalmente se asocian con personas mayores.
De alguna manera, me he sentido identificada desde muy joven con las actividades que la sociedad típicamente relaciona con las personas de la tercera edad. Esto no solo ha influido en mis pasatiempos, sino también en mi actitud hacia la vida. Valoro momentos de calma y prefiero las reuniones íntimas con amigos o familiares sobre las grandes fiestas o eventos sociales. Me deleito en la simplicidad de cuidar de mis plantas o completar un nuevo proyecto de crochet mientras escucho mi música favorita o un podcast interesante.
Una faceta particularmente reveladora de mi experiencia con la edad subjetiva es mi tendencia a relacionarme mejor con personas mayores que con aquellas de mi propia edad cronológica. Esta inclinación no es algo nuevo; se remonta a mi adolescencia. A menudo, me encontraba en situaciones donde la conversación fluía más naturalmente y era más enriquecedora con personas significativamente mayores que con mis contemporáneos. Tengo recuerdos vívidos de pasar tardes charlando con ancianos, absorbiendo sus historias y anécdotas con un interés genuino. Estas relaciones intergeneracionales han enriquecido mi vida de maneras invaluables, ofreciéndome una ventana a la sabiduría y experiencias de vida que de otro modo no habría conocido.
Es más, esta combinación de características juveniles y gustos considerados para "mayores" me ha llevado a reflexionar sobre lo que realmente significa "sentirse" de cierta edad. ¿Es acaso la juventud solo la apariencia física, o es algo que también llevamos dentro, en nuestras alegrías, intereses y maneras de relacionarnos con el mundo?
Para mí, mi edad subjetiva es un poco un collage de diferentes edades, cada una reflejando distintas partes de mi personalidad y mi vida. Por un lado, mi apariencia física me conecta con una versión más joven de mí misma, pero mis intereses y pasatiempos resuenan con la sabiduría y serenidad que asociamos con la vejez.
Esta iniciativa de compartir nuestras edades subjetivas es una maravillosa oportunidad para celebrar la diversidad en cómo experimentamos la vida y el envejecimiento. Cada uno de nosotros lleva un collage rico y variado de experiencias, preferencias, y perspectivas que desafían la simple categorización por edad cronológica. Al final, ¿qué importancia tiene la edad si podemos vivir nuestras vidas con
plenitud, abrazando cada momento con curiosidad y aprecio?
Gracias, @lilianajimenez, por invitarme a participar en esta reflexión tan personal y reveladora. Ha sido un placer explorar y compartir un poco más sobre mí en este espacio. Espero que mi historia inspire a otros a mirar más allá de los números y encontrar la belleza en todas las edades que llevamos dentro.
Hello to this entire community 🙋🏻♀️
I wasn't sure about posting, but I wanted to accept the kind invitation from lilianajimenez to participate in her Initiative: What is your subjective age? How old do you feel?
Before sharing my experience, let me briefly explain what subjective age is. It refers to how we feel in relation to our age; not necessarily how many years we've lived, but how we perceive our vitality, youth, or internal maturity. It's a reflection of how we see ourselves and how we interact with the world around us, influenced both by our physical and mental well-being, as well as our experiences and attitudes.
Now, I am officially 39 years old, but I'm often told I look younger. In my family, most of us seem younger than we actually are. For example, my sister is 31 but could easily pass for someone in her twenties. I guess we can thank our mother's side of the family for that. It's somewhat funny how we've benefited from prolonged youth on one side of the family, while on the other side, we've inherited premature graying 🤦♀️.
Speaking more deeply about subjective age, I've always been someone who adores tranquility. Since my teens, I preferred watching a movie at home over going out to noisy parties. Additionally, I have a special love for plants and crochet, hobbies generally associated with older people.
Somehow, from a young age, I've felt identified with activities that society typically relates to the elderly. This has not only influenced my hobbies but also my attitude towards life. I value moments of calm and prefer intimate gatherings with friends or family over big parties or social events. I delight in the simplicity of caring for my plants or completing a new crochet project while listening to my favorite music or an interesting podcast.
A particularly revealing aspect of my experience with subjective age is my tendency to relate better to older people than those of my own chronological age. This inclination is not something new; it dates back to my adolescence. Often, I found myself in situations where conversation flowed more naturally and was more enriching with people significantly older than my contemporaries. I have vivid memories of spending afternoons chatting with elders, soaking up their stories and anecdotes with genuine interest. These intergenerational relationships have enriched my life in invaluable ways, offering me a window to wisdom and life experiences I would not have known otherwise.
Moreover, this combination of youthful traits and tastes considered for "older" individuals has led me to reflect on what it really means to "feel" a certain age. Is youth only a physical appearance, or is it also something we carry within, in our joys, interests, and ways of relating to the world?
For me, my subjective age is somewhat a collage of different ages, each reflecting different parts of my personality and my life. On one hand, my physical appearance connects me to a younger version of myself, but my interests and hobbies resonate with the wisdom and serenity we associate with old age.
This initiative to share our subjective ages is a wonderful opportunity to celebrate the diversity in how we experience life and aging. Each of us carries a rich and varied collage of experiences, preferences, and perspectives that defy simple categorization by chronological age. In the end, what does age matter if we can live our lives fully, embracing each moment with curiosity and appreciation?
Thank you, lilianajimenez, for inviting me to participate in this deeply personal and revealing reflection. It has been a pleasure to explore and share a bit more about myself in this space. I hope my story inspires others to look beyond the numbers and find the beauty in all the ages we carry within.
