Feliz jueves de los recuerdos, de nuevo estoy entre ustedes, para compartirles una foto de mi tercer hijo, Manuel Antonio, para el momento de la foto mi pequeño Manu, como le digo, tenía año y medio y de mis 4 hijos, es el más pegado a mí, no sé si tenga que ver que lo amamante hasta los dos años, ya que no quería nada con tetero, de mis hijos fue el que tomó su primer tetero a los 11 meses, ya que su delirio era la leche materna, se le fue incorporando su alimentación, jugos, sopas, todo como el pediatra lo recomendara, pero el tetero, no lo quería.

Por eso lo ven sentado de esa manera, ya que estaba buscando la forma de que se le diera, pero en ese momento estabamos en la Universidad y las muchachas que ven alrededor, estaban en su acto de grado en nuestra casa de estudio, y yo me jugaba con él diciéndole, no te da pena que las muchachas te vean, y él volteo a verlas y no sabiamos que mi hermana tenía la cámara fotográfica y nos agarró el descuido a ambos.

Quiero que sepan que soy fiel defensora de la lactancia materna, ya que cuando salí embarazada de mi primer hijo, estudiaba Educación Preescolar, y casualmente estábamos viendo Puericultura, y en el salón habían 5 estudiantes embarazadas, por lo cual recibimos varias charlas sobre la lactancia materna, y entendí los beneficios y ventajas para nuestros hijos y hasta para nosotras las madres, que prefería darla durante sus primeros meses de vida, comprendiendo todo los beneficios que mis hijos tenían, pero todos mis hijos, después de probar el primer tetero, dejaban de amamantar, pero mi Manu fue diferente, a el no le gustaba el tetero, así que yo se la continuaba dando, pero en una de sus consultas, la enfermera me recomendó que después que cumpliera los dos años, se la fuera quitando, ya que no tenía ningún beneficio, pero no quise queria que fuera traumático, ya que observé a muchas madres colocando sabores desagradables, para que los niños la dejarán, así que siguiendo la recomendación de Dayana (la enfermera), al llegar a los dos años, cada vez que me la pedía, le ofrecía otras alternativas, galletas maría, compota, gelatina, y así fue que la fue dejando, sin desapego traumáticos y todos felices.

Recordando todo esto, puedo certificar que realmente por el tiempo que duro su lactancia materna, es el que más apegado a mí es, aunque es el menos expresivo en cuanto a besos y abrazos, es el que, aunque ya no viva conmigo, quien más me busca y comparte conmigo, y me pide también😅😂

Está fue mi participación para esta semana del Concurso de TBT, un día de estos promovido por el profesor @lanzjoseg, aprovecho de invitar a mis amigas @yole @dinaaczib, @rosana6 , espero leerlas. Dios les bendiga 🙏🏼

Imagen obsequio de @proymet